Los ministros de Defensa de Centroamérica reconocieron que la región necesita de un presupuesto inmediato de US$ 150 millones, para renovar armamento y equipos, así como otras áreas de seguridad, para dar una batalla efectiva en contra del crimen organizado.
Así lo confirmo el ministro de Defensa de El Salvador, el general David Munguía Payés, en el marco de la reunión de este miércoles en San Salvador con la mayoría de sus homólogos de la región, como parte de la Conferencia de las Fuerzas Armadas Centroamericanas (CFAC), organismo del cual Munguía es también presidente del Consejo Superior.
En el organismo centroamericano de Fuerzas Armadas también participa como invitado República Dominicana, al igual que en la mayoría de senos de integración del istmo.
Al encuentro, presidido por el general Munguía Payés en El Salvador, también asistieron el viceministro por la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas de República Dominicana, el mayor general Gilberto Santiago Delgado; el subsecretario de Estado en el Despacho de la Defensa Nacional de Honduras, Carlos Roberto Funes Ponce; el comandante en jefe del Ejército de Nicaragua, general Julio César Avilés Castillo y el ministro de la Defensa de Guatemala, general Juan José Ruiz Morales.De la reunión de alto nivel de jefes militares de la región centroamericana y República Dominicana en la capital salvadoreña también participó como invitado especial, quien no participó de la conferencia de prensa este miércoles al mediodía, el vicesecretario del Ejército de los Estados Unidos, Joseph W. Westphal, quien se encuentra en una gira regional.
Al respecto de las deficiencias de equipos de los Ejércitos de la zona, Munguía Payés reiteró la falta de defensa aérea en El Salvador, pues los A-37, los cazas de la Fuerza Aérea Salvadoreña (FAS), se encuentran en tierra, sin especificar la causa, pero que se presume se deba a la antigüedad y alto gasto de operación de estas aeronaves, ya sea por falta de presupuesto, escasez de repuestos o alto consumo de combustible.
En mayo pasado, Munguía anunció que el Ejército salvadoreño necesitaría de un refuerzo presupuestario de más de US$30 millones, para lo que restaba del año, pero, sin embargo, el presidente Mauricio Funes anunció la semana pasada que muchos ministerios tendrán que ajustarse el cinturón de sus presupuestos, para lo que falta del año, pues el dinero del Estado no alcanzará.
La falta de estos aviones se percibe, sobre todo, reconoció el titular de Defensa salvadoreño, porque eran los “interceptores” de aviones sospechosos de transportar droga que invaden el espacio aéreo salvadoreño, son escoltados fuera de él para evitar que descarguen en el territorio.
“Como saben, los Estados Unidos posee el centro de monitoreo en el Aeropuerto Internacional El Salvador, pero en estos momentos carecemos de las aeronaves interceptoras de aviones que ingresen de forma ilegal en nuestro espacio aéreo”, dijo Munguía.
El resto de titulares no actualizaron el tema de sus equipos y armas, pero por informaciones pasadas, se conoce que Guatemala urge de al menos dos o tres radares primarios para cubrir su espacio aéreo y combatir las “narco avionetas” u otro tipo de aviones con ilícitos.
En el caso de Honduras, también necesitaría esa clase de equipos para sus aguas y espacio aéreo por el Caribe, donde detuvo a una tripulación con droga, el pasado 13 de julio que había hundido un sumergible que presuntamente transportaba más narcóticos. Honduras también evalúa la compra de una flota de Embraer Súper Tucano.
El general Munguía recordó también el concepto de corresponsabilidad de los Estados Unidos, sobre todo en el tema de narcotráfico y que ya se ofreció un capital semilla por US$200 millones, tras la visita del presidente Barack Obama a El Salvador a mediados de febrero pasado.
“De hecho, en el caso particular de El Salvador trabajamos muy de cerca con el Comando Sur de los Estados Unidos, tenemos enlace con el control que poseen en Florida para el seguimiento del narcotráfico”, precisó el jefe militar salvadoreño.
Desarticulación de Los Zetas
Por su parte, el titular de Defensa de Guatemala, el general Ruiz Morales, destacó que consideraba que la estructura de la banda delincuencial mexicana de 'Los Zetas' podría estar completamente desarticulada en su país, ya que la mayoría de cabecillas de ese grupo criminal detectados en territorio guatemalteco, en los últimos seis meses, se encontrarían ya en prisión.
Al respecto de las operaciones señuelo de los Estados Unidos que habrían infiltrado armas marcadas en la zona para seguimiento de criminales, el subsecretario de Estado en el Despacho de la Defensa Nacional de Honduras, Carlos Roberto Funes Ponce, aseguró que aún se encuentra en fase de averiguaciones y que se ha trasladado una petición de su Gobierno al Departamento de Estado estadounidense para profundizar la información.
En cuanto al tráfico de armas pesadas, como cohetes Luv, decomisados recientemente tanto en Honduras como en El Salvador, los altos jefes militares acordaron marcar este tipo de armamento en su poder para darle seguimiento en caso sea sustraído, ya que a diferencia de las pistolas, revólveres y fusiles, no posee un número de identificación, sino solo un número de lote.
Aparte de que se han reforzado las medidas de seguridad para evitar corrupción de los efectivos militares, indicó Munguía Payés, y se ha logrado desarmar células de militares que, en el caso de El Salvador, intentaron extraer un importante número de granadas, hace varias semanas.
Los ministros también acordaron intensificar el intercambio de inteligencia y comunicación en operaciones o investigaciones que se desarrollen en el combate al crimen organizado que cada gobierno centroamericano le encomienda a su respectivo Ejército.
